Templo Carmelitas
- 19:00 Misa.
- A continuación, exposición del Santísimo hasta las 20:30 h.
Primera lectura
Comienzo de la carta a los Hebreos (1,1-6):
En muchas ocasiones y de muchas maneras habló Dios antiguamente a los padres por los profetas.
En esta etapa final, nos ha hablado por el Hijo, al que ha nombrado heredero de todo, y por medio del cual ha realizado los siglos.
Él es reflejo de su gloria, impronta de su ser. Él sostiene el universo con su palabra poderosa. Y, habiendo realizado la purificación de los pecados, está sentado a la derecha de la Majestad en las alturas; tanto más encumbrado sobre los ángeles cuanto más sublime es el nombre que ha heredado. Pues ¿a qué ángel dijo jamás:
«Hijo mío eres tú, yo te he engendrado hoy»;
y en otro lugar:
«Yo seré para él un padre,
y él será para mí un hijo?».
Asimismo, cuando introduce en el mundo al primogénito, dice:
«Adórenlo todos los ángeles de Dios».
Palabra de Dios
Salmo
Sal 96,1.2b.6.7c.9
R/. Adorad a Dios todos sus ángeles
V/. El Señor reina, la tierra goza,
se alegran las islas innumerables.
Justicia y derecho sostienen su trono. R/.
V/. Los cielos pregonan su justicia,
y todos los pueblos contemplan su gloria.
Adoradlo todos sus ángeles. R/.
V/. Porque tú eres, Señor,
Altísimo sobre toda la tierra,
encumbrado sobre todos los dioses. R/.
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (1,14-20):
DESPUÉS de que Juan fue entregado, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios; decía:
«Se ha cumplido el tiempo y está cerca el reino de Dios. Convertíos y creed en el Evangelio».
Pasando junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés, el hermano de Simón, echando las redes en el mar, pues eran pescadores.
Jesús les dijo:
«Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres».
Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
Un poco más adelante vio a Santiago, el de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. A continuación los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon en pos de él.
Palabra de Dios
Comentario al Evangelio
Juan Carlos Martos, cmf
Queridos amigos y amigas:
En este lunes, la liturgia da inicio de nuevo al tiempo ordinario. El comienzo del evangelio de Marcos abre el telón con una síntesis sobre las primeras actividades de Jesús: Su predicación y los primeros frutos. Cuatro pescadores lo dejan todo y le siguen.
- El primer sermón de Jesús. Es muy corto. Se reduce a dos frases: El anuncio del Reino y la llamada a convertirse. Las pronuncia en Galilea, al norte de Israel, zona próspera, conflictiva y poco religiosa. Jesús emprende la actividad “cuando detuvieron a Juan Bautista”.
¿Qué les dice Jesús a aquellos campesinos y pescadores? Una buena noticia. No hay frustración mayor que una “buena noticia” falsa. Transmitir noticias sin pruebas, aunque sea con buena intención, solo acarrea un fiasco mayor. Solo es “buena noticia” la que se basa en la verdad. Y si es cierto que verdad, bondad y belleza caminan juntas, toda buena noticia ha de ser siempre verdadera, buena y bella.
- La conversión. Jesús jamás amenazó ni asustó. Anunció algo cierto y bueno: lo cerca que está el reinado de Dios. No era necesario precisar la fecha exacta de su implantación porque, en la medida en que se advierte, las personas se convierten, se transforman. Vuelven a Dios y mejoran de conducta. Como hizo el hijo pródigo.
Todos deseamos que cambie el mundo, porque no nos gusta lo que vemos, pero somos muy escépticos. Sonreímos sarcásticamente cuando alguien nos anuncia progresos ambiciosos e inminentes. Nos resistimos a creer y no tenemos la menor intención de cambiar nuestros hábitos. Solo nos convierten cuando ocurren.
- Las llamadas vocacionales. Les sucedió a aquellas dos parejas de hermanos. Jesús se les acercó y los miró. La suya no fue una mirada superficial sino la de quien intuye lo más profundo de la persona: Podían llegar a ser más de lo que eran. No necesitaron apadrinamiento, ni títulos, ni dote… ni informes de idoneidad para ser fichados. ¿Qué les movería a ellos a seguir a Jesús dejándolo todo, incluida familia, casa, profesión y patria? No lo dice expresamente el texto en este momento… Solo después Marcos, y con él los demás evangelistas, aclaran que sus motivaciones iniciales fueron más políticas que otra cosa. Tuvieron que ser purificadas y reconvertidas. Pese a ello, es evidente el poder de contagio de Jesús que les rinde y que después, no antes, les irá convirtiendo pacientemente al Reino.
Vuestro hermano en la fe
Juan Carlos Martos cmf
San Teodosio
De https://www.aciprensa.com/santos/santo.php?id=15
Nació en Turquia en el año 423, y desde pequeño, por inculcasión paterna, leía con mucho fervor las Sagradas Escrituras. Siguiendo el ejemplo de Abraham, el santo decidió dejar sus riquezas y su familia, para peregrinar a Jerusalén, Belén y Nazaret, y luego convertirse en religioso. San Teodosio se fue a vivir no muy lejos de Belén, y tuvo como guía espiritual al abad Longinos. Tras ser ordenado como sacerdote, recibió la orden de encargarse del culto de un templo ubicado entre Jerusalén y Belén. El santo desplegó su labor con mucha sabiduría y humildad, y fue testimonio de una vida santa y llena de oración, lo cual motivó que otros jóvenes también desearan convertirse en religiosos, y más adelante, la fundación de tres conventos en las cercanías de Belén.
El santo también construyó, cerca de Belén, tres hospitales para la atención de ancianos, enfermos necesitados y discapacitados. Los monasterios dirigidos por San Teodosio eran como una ciudad de santos en el desierto, pues todo se hacía a su tiempo, con exactitud, oración, trabajo y descanso.
San Teodosio enfermó penosamente, y falleció a los 105 años en el año 529. El Arzobispo de Jerusalén y muchos ciudadanos de Tierra Santa asistieron a su entierro y durante sus funerales se obraron varios milagros.