Templo de las Carmelitas
- 19:00 Misa. Sufragio Ramón Solaz Durá
- A continuación, exposición del Santísimo hasta las 20:30 h
Primera lectura
EL Señor Dios se dijo:«No es bueno que el hombre esté solo; voy a hacerle a alguien como él, que le ayude».
Entonces el Señor Dios modeló de la tierra todas las bestias del campo y todos los pájaros del cielo, y se los presentó a Adán, para ver qué nombre les ponía. Y cada ser vivo llevaría el nombre que Adán le pusiera.
Así Adán puso nombre a todos los ganados, a los pájaros del cielo y a las bestias del campo; pero no encontró ninguno como él, que le ayudase.
Entonces el Señor Dios hizo caer un letargo sobre Adán, que se durmió; le sacó una costilla, y le cerró el sitio con carne.
Y el Señor Dios formó, de la costilla que había sacado de Adán, una mujer, y se la presentó a Adán.
Adán dijo:
«Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Su nombre será mujer ,, porque ha salido del varón».
Por eso abandonará el varón a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne.
Los dos estaban desnudos, Adán y su mujer, pero no sentían vergüenza uno de otro.Palabra de Dios
Salmo
Sal 127,1-2.3.4-5
R/. Dichosos los que temen al Señor
V/. Dichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos.
Comerás del fruto de tu trabajo,
serás dichoso, te irá bien. R/.
V/. Tu mujer, como parra fecunda,
en medio de tu casa;
tus hijos, como renuevos de olivo,
alrededor de tu mesa. R/.
V/. Esta es la bendición del hombre
que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión,
que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. R/.
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (7,24-30):
EN aquel tiempo, Jesús fue a la región de Tiro.
Entró en una casa procurando pasar desapercibido, pero no logró ocultarse.
Una mujer que tenía una hija poseída por un espíritu impuro se enteró enseguida, fue a buscarlo y se le echó a los pies.
La mujer era pagana, una fenicia de Siria, y le rogaba que echase el demonio de su hija.
Él le dijo:
«Deja que se sacien primero los hijos. No está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los perritos».
Pero ella replicó:
«Señor, pero también los perros, debajo de la mesa, comen las migajas que tiran los niños».
Él le contestó:
«Anda, vete, que por eso que has dicho, el demonio ha salido de tu hija».
Al llegar a su casa, se encontró a la niña echada en la cama; el demonio se había marchado.
Palabra del Señor
Comentario al Evangelio
De https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/comentario-de-manana
Queridos amigos y amigas:
Hay un modo de situarse en la vida, en desnudez. Sin demasiadas defensas, a pecho descubierto. Un modo de afrontar la vida y un modo de relacionarnos con los demás. Como Adán y Eva antes de enredarse en líos: los dos estaban desnudos, pero no sentían vergüenza uno de otro. Es el modo de vivir de la gente libre.
Algo así me recuerda la llamada mujer sirofenicia, pagana (y por tanto fuera del ámbito de “los cercanos de Jesús”) rogando a Jesús que cure a su hija de un espíritu inmundo. Me encanta la libertad de esta mujer pero me asombra mucho más la de Jesús: pocos son capaces de cambiar el discurso o el modo de actuar cuando las circunstancias lo piden. Pocos saben reconducir sus propios planes y menos aún cuando lo hacen porque una extraña le hace salir de su zona de confort, como ahora se dice.
Mujer, madre, pagana y extranjera: no solo consigue que el mismísimo Hijo de Dios recapacite y cambie, sino que además, por su arrojo y libertad creyente, “el demonio salió de su hija”. Parece que uno de los modos más simples y directos para conseguir que “los demonios” salgan, sea ir por la vida más “desnudos”, sin defensas, sin ir por ahí “a piñón fijo”, capaces de cambiar, de rectificar el rumbo y el discurso. ¡Probemos!
Vuestra hermana en la fe,
Rosa Ruiz @rosaruizrmi